16.7.07

Parecidos razonables 2

Que me disculpen los expertos en arte si digo alguna herejía, pero cuando he visto esta fotografía rescatada de algún viejo desván, me he acordado de Johannes Veermer; las coincidencias de las dos modelos que se están comunicando bajo la luz de la ventana me resultan evidentes.


Inspired by Sunlight - 1957, originalmente cargada por vieilles_annonces.


Muchacha leyendo una carta en una ventana abierta (1657-1659) Fuente: Wikimedia Commons


Actualización 20-10-07: Se ha cambiado la dirección de la fotografía

6 comentarios:

Anónimo dijo...

No soy experto en arte, pero no hay nada que disculpar por expresar tu opinión. Sino, tedremos que pedir permiso por pensar.

Un viejo axioma del arte, para diferenciar imitación de copia, o plagio es; No somos más que enanos (los contemporáneos) subidos a lomos de gigantes (los clásico).
Osea, si quieres hacer algo nuevo, debes saber lo que se ha hecho antes.

El hecho de que sea con el teléfono, le aporta un valor actual añadido, opino. Si no hubiera teléfono, podría ser también una buena adaptación.

No te disculpes, tienes un buen ojo.
DDD)

Muxfin dijo...

Antoni, tomo nota, aunque mi intención era hacer una figura retórica para indicar que no soy un experto.
El aceptar de antemano que otros tienen más conocimientos que yo, no quita que pueda expresar mi opinión.
Un saludo

Unknown dijo...

Si que es curioso.
La paleta de colores es prácticamente la misma, la luz también ambas se comunican (una mediante una carta otra mediante un teléfono), pero a mi me gusta más Veermer, aunque reconozco que el genio holandés siempre me ha fascinado.

Muxfin dijo...

Telémaco, coincido contigo, y es que hasta para copiar hay que saber hacerlo.

Lula Towanda dijo...

Lo que es curioso es la mirada que traspasa la venta mientras habla por teléfono, muy diferente al cuadro de Veermer en que la mirada está recogida en el papel.
Para mi que está hablando con alguien que está viendo por la ventana.
Coincido con vosotros en la similitud de la luz y los colores.

Muxfin dijo...

Lula, difiero en tu apreciación, esa mirada a la lejanía la tengo muy vista cuando mis hijas hablan con sus novios.
Una quiere traspasar la ventana y la otra traspasar la carta.